Hoy, el primer lunes de mayo del 2024, el planeta moda y algunos otros universos colinden para mostrarnos que todos amamos la moda y sobretodo que Anna Wintour, independientemente de lo soporífera que ha sido su gestión del Vogue estadounidense, sigue siendo la mujer más poderosa de la Industria.
Y aunque los últimos años la popularidad del Met Gala ha crecido de manera descomunal, muchos desconocen que este evento orquestado por el Metropolitan Museum of Art Costume Institute que se lleva a cabo el primer lunes de mayo, no se pierdan el documental del 2016 que documenta todo lo que sucede en la preparación de la exhibición China: Through the Looking Glass con Rihanna, en Guo Pei, convirtiéndose en la referencia absoluta de como un look de la Met gala puede cimentar tu ingreso al Olimpo de la moda. Ademas de permitir a las celebs mostrar sus credenciales de moda el Met Gala funciona para recaudar fondos para el ala de moda del museo, el único departamento curatorial del Met que tiene que pagarse solo.
“La fiesta del año” para el Who is Who del sistema de moda, y catalizador de la popularidad de las firmas y celebridades, también fue nombrado como el ATM del MET, es decir su cajero automático que le suministra cantidades importantes de dinero, la gala del año pasado recaudo 22 millones de dólares. La lista de invitados es un secreto muy bien guardado, aunque las firmas de moda y el equipo de Wintour inician a trabajar en los preparativos del siguiente año de manera inmediata a la culminación del evento. Contrario a otros eventos importantes en el calendario social neoyorquino, solo puedes acudir a la Met Gala por invitación y no es un asunto de precio, que este año los boletos oscilan en los $75,000 dólares, $25,000 más que el año pasado, con mesas que inician en $350,000 dólares que son pagados por las marcas, ellos cubren los costes de los invitados a su mesa.
Esto quiere decir que aunque alguien done cantidades obscenas de dinero al Museo Metropolitano, eso no lo califica para ser invitado, incluso si una marca o compañía compra una mesa, la total elección de quienes podrán sentarse es de la Sra. Wintour y su equipo quienes eligen a los 400 invitados, por lo que el evento puede considerarse como el “catálogo” del presente y el futuro de la moda, los requisitos para la inclusión tienen que ver más con popularidad, logros y belleza, la divinidad trinidad de acuerdo a Wintour, que con dinero.
Y el dinero justamente parece ser lo que podría arruinar la velada para Anna Wintour, quien siempre es la primera en salir del Mark Hotel, la sede no oficial del evento, ya que el sindicato de trabajadores de Condé Nast, quienes están en huelga desde hace varios meses exigiendo un pago justo, amenazo a la compañía con que si no se veían en las mesas de negociación se verían en la alfombra del Met, esta polémica se suma a lo reportado por The Cut sobre la oposición de la mesa directiva del museo a que John Galliano fuera el homenajeado en la gala del 2024, según el medio estadounidense Anna Wintour y Andrew Bolton tenían prevista la retrospectiva del diseñador británico como tema de la Met Gala y tuvieron que cambiarlo de último momento a Sleeping Beauties: Reawakening Fashion y utilizar únicamente prendas de la colección del Costume Institute.
Personalmente disfruto la exhibición más que la alfombra roja, el trabajo de Andrew Bolton, curador del Costume Insitute, me resulta extremadamente inspirador, ya que siempre he considerado que la verdadera trascendencia de la moda tiene que ver con la parte creativa/intelectual que con la parte efímera de las tendencias o celebridades. No se pierdan la transmisión en directo en el sitio de instagram de Vogue. La exhibición correrá del 10 de mayo al 02 de septiembre.